Lugar elegido (por Ezequiel K.)

Elegi el planetario Galileo Galilei de la ciudad de Buenos Aires.

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Así comienza Constelaciones Míticas de Buenos Aires, un espectáculo multimedia que "llegó" al Planetario de la Ciudad de la mano de su director Leonardo Moledo, en el marco de las actividades organizadas en el Festival Buenos Aires piensa.
Constelaciones Míticas... se propone y de verdad lo logra, escribir en el cielo -a la manera en que otros pueblos lo hicieran antes- los propios mitos de la ciudad de Buenos Aires.
Y sí. Tal vez se trate de un imposible intento de entender, pero lo que sí queda claro en esta actividad es que en el mismo intento se construye. ¿Qué? Historia, cultura, identidad, memoria, verdad. En ese acceso a nuestras verdades nos enteramos que un tal Telomián Condic, cacique de los querandíes, recibió en sueños la visita de un dios que le advirtió que unos hombres venidos de muy lejos habrían de quitarle la patria, la tierra, el cielo. Y en su retirada, cruzando con sus hombres el firmamento durante toda una noche, del oeste hacia el este, el cacique formó -seguramente sin saberlo- "arrojando puñados del polvo de la pampa", lo que hoy conocemos como la Vía Láctea. Un camino repleto de millones de estrellas que "marcan el rumbo de los antiguos habitantes de la tierra hacia el olvido". Así, con la imagen de los barcos invasores acercándose por el río, se ubica en el cielo del Planetario la primera constelación mítica de Buenos Aires, la del Riachuelo. Después van a venir otras que, desde diferentes ángulos, son las que eligió Moledo para dar cuenta de una idiosincrasia que no es ingenua, que no es neutra, que es una decisión. Y van a sucederse entonces -a través de los primeros capítulos de esta historia- las siluetas de Gardel, Tita Merello, Troilo, Niní Marshall, una simpática parejita de tango, Borges, Cortázar, los siete locos que dibujan -en los Siete Cabritos-, la constelación de Roberto Arlt. En otro capítulo, el de las Fronteras, va a tener su lugar también el mundo de la ciencia con las constelaciones de Leloir, Houssay y Milstein, los tres premios Nobel, que quedan cerca del Microscopio, formando la constelación de los científicos.